La clasificación de los detergentes depende de su composición y de su uso específico. A continuación, te muestro las principales categorías de detergentes:
Detergentes Aniónicos: Son los más comunes y se caracterizan por su gran capacidad de limpieza y formación de espuma. Son ideales para eliminar grasas y suciedad en general, siendo ampliamente utilizados en lavandería y limpieza de superficies.
Detergentes No Iónicos: No generan tanta espuma como los aniónicos, lo que los hace perfectos para el uso en lavadoras automáticas e industriales. Su poder desengrasante es excelente, y son efectivos en agua dura.
Detergentes Catiónicos: Menos comunes en limpieza de ropa, estos detergentes tienen propiedades desinfectantes y suavizantes, por lo que se usan más en productos de cuidado personal y suavizantes de telas.
Detergentes Anfóteros: Son versátiles y suaves, se encuentran generalmente en productos especializados para superficies delicadas o en detergentes de uso profesional que necesitan bajo nivel de irritación, como en lavandería hospitalaria.
Detergentes Biodegradables: Estos detergentes están formulados con ingredientes ecológicos que se descomponen fácilmente en el medio ambiente. Son ideales para quienes buscan opciones de limpieza sostenibles.
Detergentes Enzimáticos: Contienen enzimas que ayudan a descomponer manchas orgánicas, como alimentos, sangre y sudor. Son muy efectivos en lavanderías industriales y comerciales que requieren una limpieza profunda.
Esta clasificación permite seleccionar el tipo de detergente más adecuado según el tipo de tejido, el nivel de suciedad y las necesidades específicas de cada industria o aplicación doméstica.